Guía de Camilla Franks de la Toscana y Siena

CAMILLA se ha asociado con la mayor colección independiente de hoteles de lujo del mundo, Leading Hotels of the World, para reimaginar algunos de los hoteles más emblemáticos de Italia al más puro estilo CAMILLA: como estampados de edición limitada pintados a mano que se despliegan sobre lujosas sedas y satenes. El próximo capítulo se desarrolla en las profundidades de la Toscana, a las afueras de Siena, en el pintoresco y amplio hotel Castel Monastero.

GUÍA DE CAMILLA FRANKS DE TOSCANA Y SIENA

Escondido en el corazón de la campiña toscana, Castel Monastero es un lugar donde el tiempo parece haberse detenido. Una finca aislada que combina ingeniosamente la historia medieval y el lujo encantador de hoy en día - es la base perfecta desde la que abrazar esa tranquilidad única de la Toscana un día de sueño a la vez.

En julio de 2021, me encontré conduciendo por las sinuosas carreteras que atraviesan las colinas de la Toscana. La región es una fiesta para los sentidos, con vinos Chianti, campos de maíz, bosques de castaños e interminables hileras de cipreses que invitan a explorar, respirar hondo y saborear cada momento. Tras hacer una parada para degustar algunas delicias locales, un discreto edificio aparece en el horizonte del Valle Ombrone: Castel Monastero.

La historia de Castel Monastero comienza en el siglo XI, cuando se fundó como monasterio benedictino. El monasterio estaba dedicado a San Miguel y servía como lugar de culto y contemplación para los monjes. A finales del siglo XX, Castel Monastero fue restaurado y transformado en el lujoso complejo turístico que es hoy. El encanto histórico y el patrimonio arquitectónico de la propiedad se conservaron cuidadosamente durante esta renovación, garantizando que el pasado siga estando muy presente en el ambiente de la finca.

En la explanada de Castel Monastero se encuentra el restaurante Contrada, galardonado con una estrella Michelin. Una obra maestra culinaria que combina ingeniosamente recetas tradicionales toscanas con delicias de temporada, junto con una extensa carta de vinos procedentes de granjas y bodegas locales.

Con Siena a poca distancia en coche, las opciones gastronómicas toscanas son ilimitadas. Relájese después de explorar la ciudad con un Chianti y aceitunas locales en un pintoresco bar de vinos escondido en una callejuela adoquinada o siga sus sentidos hasta un pequeño pueblo y pregunte por el especial del día. Al fin y al cabo, estamos en la Toscana, así que siéntese y disfrute.

Si le apetece tumbarse junto a la piscina con un buen libro (y una bebida aún mejor), está en el lugar adecuado.

Sin embargo, si su corazón anhela lo que hay más allá de las colinas, súbase al coche y diríjase a Siena. Amada por sus calles medievales y su arquitectura antigua, esta bella y vibrante ciudad alimentará su alma.

En el reino de la opulencia, Siena emerge como una joya exquisita, una ciudad donde cada adoquín rezuma historia y las imponentes estructuras antiguas susurran historias de grandeza. Dividida en 17 distritos distintos, cada uno con su propio nombre y llamativos colores, un paseo por sus calles se convierte en un viaje a través de un tapiz de banderas en constante cambio. A diferencia de las grandes metrópolis del mundo, Siena presume de un inquebrantable sentido de la identidad, un rasgo raro y cautivador que perdura en la memoria mucho después de haber dicho "adiós por ahora".

El impresionante Duomo de Siena, orgulloso centro de la ciudad, le atraerá sólo con su fachada, una obra maestra del detalle que preludia la opulencia sin igual del interior. Un lienzo contrastado de columnas a rayas blancas y negras reviste suntuosamente la catedral, formando un marco para el arte onírico de sus techos y mármoles. No deje de visitar la Sala de la Biblioteca, una obra de arte en sí misma.

No se puede visitar Siena sin atravesar las puertas de la Pinacoteca Nazionale. Este célebre museo nacional se fundó en 1932 y alberga una ilustre colección de pintura medieval tardía y renacentista de artistas italianos. Pase el día sumergiéndose en las pinturas sienesas de los siglos XIV y XV y descanse en las grandes salas vestidas de pies a cabeza con marcos dorados.

EXPLORE EL HOTEL

Si se encuentra en esta mágica parte del mundo, sería casi de mala educación no abastecerse de las delicias locales. Me refiero al Chianti, el Brunello di Montalcino y el Vino Nobile di Montepulciano, por ejemplo. Vaya directamente a la fuente visitando las bodegas locales y las tiendas de vinos boutique.

El mercado de la Piazza del Campo, que se celebra semanalmente los miércoles, transforma una de las plazas más ilustres de Siena en un animado centro de comercio local. Echa un vistazo a una cuidada selección de ropa, moda vintage, arte, cerámica y artículos para el hogar.

Pasee por la encantadora Via di Città, una estrecha callejuela escondida en el centro histórico de Siena, para descubrir varias tiendas de antigüedades y de época. En estas modestas boutiques descubrirá un tesoro de libros antiguos, ropa de época, joyas antiguas y decoración ornamental.

Ya sea para ir a la piscina, pasear por un viñedo o subir por una empinada calle adoquinada, cuando visites esta región querrás vestir con comodidad. Combina pantalones anchos o drapeados con camisetas y una americana, o un slip dress con un par de zapatillas en los meses más cálidos.